La Biblia de los Testigos de Jehová
Con
distintos grados de rigurosidad, muchas religiones de base cristiana asumen que
la Biblia es la palabra de Dios. Yo mismo fui criado con esa idea inculcada en
mi sistema operativo desde infante. Esto que quiero afirmar aquí no lo hago
desde un lugar ideológico determinado sino desde una óptica histórica
desapasionada. Me defino agnóstico, en el término literal. "No lo sé"
es lo que afirmo una y otra vez. No soy una persona de fe, pero no niego lo que
no puedo probar inexistente. "La ausencia de evidencia no es evidencia de
ausencia", dice Niel DeGrasse Tyson para un contexto completamente
distinto, pero yo lo recojo válido para este caso también. Queda abierta la
posibilidad, en mi perspectiva y cosmovisión. Esta última palabra probablemente
la use bastante y al hacerlo me refiero a la visión general del universo
conocido: la historia, la sociología, el mundo de las ideas, de la ciencia, la
geografía y lo que llamamos "el cosmos", para hacer honor al término.
Y el objetivo de esto es hacer pensar, no imponer una visión particular.
Si
la Biblia es la palabra de Dios, es crítico conocer su contenido de la mejor
manera posible. Y los de a pie no podemos, salvo los estudiosos y académicos
dedicados al tema, leerla tal cual fue escrita. Y por esto me refiero a los
distintos escritos antiguos que sobrevivieron al tiempo. Sus autores, me
refiero al Nuevo Testamento, lo hicieron en el griego académico de la época.
Esto, para los estudiosos, descarta como autores materiales de los Evangelios,
por citar 4 de los 27 libros del NT, a Marco, Mateo, Lucas y Juan. Ninguno de
ellos, salvo probablemente Mateo, tenían los talentos para escribir
decentemente y mucho menos en griego, idioma que no practicaban. Y mucho menos
con la elegancia y corrección con que los escritos están confeccionados. Pero
sigamos con lo que es académicamente aceptado hoy, que los Evangelios, escritos
aproximadamente entre los años 70 y 90 de nuestra era en forma sucesiva y
siguiendo el órden que yo los enumeré, con el de Marco siendo el más antiguo y
el de Juan el último en haberse escrito, pueden haber sido un registro de los
relatos orales sobrevividos entonces sobre las andanzas, enseñanzas y hechos
históricos que acompañaron a Jesús unos 40 años antes. Esto no es algo
infrecuente en la historia y la academia, en una mayoría muy abrumadora,
reconoce la existencia histórica de Jesús, algo que yo también suscribo. Otras
fuentes no bíblicas de la época mencionan a Jesús, o a su hermano Santiago que
tuvo una actuación pública intensa a partir de los hechos de la Semana Santa.
Yo
considero de vital importancia, para la persona creyente en la inspiración
divina de esos textos, tener acceso a la más fiel y rigurosa traducción
posible. Una cosa es vivir siguiendo las escrituras que uno considera la
palabra de Dios y otra cosa es armar una doctrina y luego acomodar las palabras
reclamadas divinas a esa doctrina, tergiversando y pervirtiendo los escritos
originales para adaptarlos a un discurso previo o caprichoso. Esto también
existe.
Este
breve artículo -parte de un libro más extenso que estoy escribiendo y cuyos
primeros capítulos ya hice público- está dedicado en particular a los Testigos
de Jehová, una entre muchas de las religiones nacidas en Estados Unidos entre
los siglos XVII y XX. Ellos adoptaron una serie de dogmas y liturgia que los
distingue de otras variantes del cristianismo y luego, en la década del 50 del
siglo XX elaboraron su propia traducción de la Biblia adaptándola a estos
caprichosos preceptos. Analicemos esto en un poco más de detalle.
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Jerónimo de Estridón 340-420 |
Durante
siglos la traducción de las escrituras antiguas fue un tema central entre
muchas religiones. En particular la Católica Apostólica Romana, pero no
exclusivamente. Las versiones que llegaban al público luego de unos siglos no
eran transcripciones de los manuscritos originales sino sus traducciones al
idioma predominante de la época. La más célebre traducción es la conocida como
Vulgata, del siglo IV y atribuida a Jerónimo de Estridón. Este estudioso del
griego y el hebreo tradujo el Antiguo y Nuevo Testamentos al latín vulgar de la
época. Otro hito importante en la historia de las traducciones de la Biblia
ocurrió a principios del siglo XVI. La autoridades de la Iglesia Católica le
encargaron a Erasmo de Rotterdam, un librepensador no afiliado al cristianismo que luego se convertiría en sacerdote católico y muy respetado por sus conocimientos, la recopilación completa de la Biblia
al griego original y al latín académico de la época. Le pusieron a su disposición
3 versiones casi completas de la Biblia, gracias a recopilaciones de manuscritos
disponibles en esa época. Y tenía también a su disposición la Vulgata de San
Jerónimo. Hoy el número de escritos es mucho mayor y los académicos serios, a
partir del siglo XIX, se nutren de las cientos de copias de los manuscritos
antiguos que sobrevivieron y que ahora se conocen. O sea, hoy un erudito en serio, a nivel académico,
de la Biblia tiene que tener profundos conocimientos del hebreo y del griego
antiguo, idiomas en que están escritos el Antiguo y Nuevo Testamento,
respectivamente.
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Erasmo de Rotterdam - 1466-1536 |
Partiendo
del formidable trabajo de Erasmo llegan las primeras traducciones al inglés,
1535 encargada por Enrique VII, luego en 1568 bajo pedido de Isabel I y luego,
la clásica y conocida "King James Bible" de 1611. Esta traducción no
se considera hoy la más lograda desde la rigurosidad pero literariamente es una
joya. Un clásico de la literatura inglesa y que influyó en el desarrollo de esa
lengua. Esta versión en inglés fue la fuente para el estudio de la Biblia
utilizada por los fundadores de la "Watchtower
Bible and Tract Society", la institución madre de los Testigos de
Jehová. Aquella sociedad fue fundada por Charles Taze Russell en 1879.
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Charles Taze Russell - 1852-1916 |
La
actividad principal de esta WBTS era la publicación de material de estudio. En
vida, Russell llegó a publicar más de 50000 páginas entre artículos, libros,
panfletos, etc. incluyendo un estudio en 6 tomos de la Biblia que vendió más de
20 millones de copias por todo el mundo. A su muerte, en 1916, en la organización
se produjo una gran crisis y divisiones que terminaron en varios grupos antagónicos.
Uno de ellos, liderados por el juez Joseph Rutherford, que reclamaba para sí el
cargo de líder dejado vacante por la muerte de Russell, se quedó con la publicación
The Watch Tower (El Atalaya) y la WBTS. En 1931, Rutherford, que venía
imponiendo profundos cambios doctrinarios, adopta el nombre de "Testigos
de Jehová", rompiendo así los vínculos con todos los restantes seguidores
de Charles Russell.
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Joseph Rutherford - 1869 - 1942 |
Entre
las teorías de Russell estaba el reclamo que la gran pirámide de Egipto era la
"versión en piedra" de la Biblia y que fue construida por inspiración
divina. Esto marcó las creencias de sus seguidores durante las primeras décadas
al punto tal que la lápida de la tumba de Russell en Pittsburg es una pirámide
de piedra.
Una
características saliente de los Testigos de Jehová es el anuncio del inminente
fin de los tiempos. Esto lo vienen anunciando desde la propia creación de la
WBTS y continuando con sus nuevos dogmas de la primera mitad del siglo XX, ya
bajo la batuta de Rutherford.
Una
de sus primeras novedades, a principio de la década de 1920, fue afirmar que
Moisés y otros personajes del Antiguo Testamento iban a renacer entre nosotros
en 1925 y a tal fin fue construida una mansión en California para que ahí se
alojen. Ninguna de estas profecías deducidas cuidadosamente de las escrituras,
según los distintos líderes del momento, se cumplieron. La mansión con el
tiempo quedó para el juez y luego vendida a su muerte. Existe todavía hoy
trasformada en una residencia para ancianos. Para mediados de siglo la fecha fue trasladada
a 1975 y al no ocurrir nada notable ese año se produjo una diáspora importante
de afiliados, incluyendo manifestaciones de indignados frente a los templos del
reino, o salas de reunión de los Testigos. Los líderes o presidentes del
consejo Directivo de los Testigos de Jehová fueron apenas 4, entre su fundador
Russell allá por 1878 y finales del siglo XX. Éstos fueron el propio Russell,
sucedido por el Juez Rutherford, luego N.H. Knorr y finalmente Frederick W.
Franz, que murió a los 99 años en 1993.
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Beth Sarim - La mansión de Rutherford hoy |
Justamente
sobre Franz me quiero explayar un poco. Este directivo nació en Kentucky en
1893 en una familia de devotos presbiterianos. Desde muy chico colaboraba en la
iglesia del pueblo y se había determinado convertirse en ministro cuando su
hermano le acercó un folleto con unos escritos de Russell y de inmediato se
convirtió a su iglesia. Para la década de 1920 Franz ya ejercía un cargo
importante en la organización y su
influencia en la doctrina aceptada por los Testigos fue fundamental. De su
inspiración es la muy cuestionada doctrina de no aceptar las transfusiones de
sangre, idea fuerza que costó cientos de muertes evitables entre la feligresía
de esta iglesia. Para 1945 ya ejercía el cargo de Vicepresidente de la
institución y Jefe de Teología. En este carácter fue nombrado al frente del
comité de traducción que se encargaría de elaborar la Biblia del Nuevo Mundo,
la versión propia de la Biblia que hoy usan los Testigos de Jehová. Este comité
de traducción fue mantenido en secreto durante muchas décadas con el argumento
de la humildad de estos servidores y que el mérito del texto obtenido debe ser
de Dios. La academia atribuye este secretismo a la falta de antecedentes
académicos y de formación de los miembros del comité. En un célebre libro
publicado en 1983 por el expulsado miembro del Cuerpo Gobernante y sobrino de
Federic Franz, Raymond Franz, llamado "Crisis de Conciencia" revela
los nombres de los miembros del comité. Estos 5 traductores son el propio Fred
Franz, Nathan H. Knorr, por entonces presidente del CG, Albert D. Schroeder, George D. Gangas and Milton Henschel. De esos 5 miembros, 4 tenían apenas
un título de colegio secundario y Franz tenía realizado en la Universidad de
Cinncinati 2 años de griego (1911-1912) antes de abandonar. Esos son los
antecedentes académicos del comité que elaboró la Biblia del Nuevo Mundo, base
para las lecturas y estudios de los Testigos de Jehová hoy.
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Raymond Franz - 1922 - 2010 |
Cuando
esta traducción estaba siendo completada se realizó en Escocia en 1954 un
juicio entre el Estado y miembro de los testigos de Jehová, Douglas Walsh, que
pretendía evitar un llamado a cumplir con obligaciones militares manifestando
ser un "ministro" de una iglesia, cargo que permitía evitar el
llamado oficial. Las transcripciones del juicio, donde Franz fue citado como
directivo de la organización, muestran que un día reclama ser experto conocedor
del griego y hebreo, entre otros idiomas, y al día siguiente debió reconocer,
bajo juramento, que no podía traducir un breve pasaje bíblico (Génesis 2:4) del
hebreo.(8)
Son ya célebres entre la
academia los pasajes de la Biblia del Nuevo Mundo totalmente alterados para
adaptarlos a la liturgia previamente aceptada por los Testigos de Jehová. Entre
los más notables están Juan 1:1 -el más conocido y sobre el cual se fundamenta la negación de Jesús
como Dios y que será motivo de un artículo en sí mismo- Juan 15:4,5; Juan
17:26; Galatians 1:16; Romanos 8:10; Colossians 1:27 and 2 Corinthians 13:5 Mateo
25:46, 2 Pedro 2:9 and Actos 4:21 y muchos otros.
No sólo son conocidas las alteraciones selectivas de los textos
originales sino que la organización introduce la llamada "Traducción entre
líneas" donde generan textos absolutamente ausentes en los manuscritos
originales reclamando que estos textos llegan a los miembros del comité de
difusión de la organización directamente del Espíritu Santo. Y condenan con
particular énfasis cualquier intento de pensamiento independiente crítico que
ponga en duda no solo los escritos de la Biblia ya adaptados al discurso de los
Testigos de Jehová, sino principalmente los escritos e interpretaciones del Cuerpo
Gobernante ya que todos estos son de inspiración divina. Para lograr esto los
feligreses tienen prohibido leer libros o artículos que no provengan de sus
exclusivos canales de comunicación. Y la interpretación de los dichos de la
Biblia no puede ser una conclusión personal sino la que dice su órgano de
comunicación.
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El Atalaya - Primera Edición de julio de 1879. Hoy tienen una tirada mensual mundial promedio de 94 millones de ejemplares |
Estas creencias, dogmas, liturgia y doctrinas no serían de mi
particular preocupación si no fuera que veo los efectos que producen en
personas cercanas y queridas. Regulando y normalizando actitudes personales
como el comportamiento diario, la elección de una profesión, la elección de la
persona amada, la ya mencionada prohibición de transfusiones de sangre, la
prohibición de celebrar cumpleaños y fiestas, ni siquiera brindar por la salud
o fortuna del amigo o familiar y también el castigo colectivo al díscolo, al
que se atreve a criticar o al que no cumple con los estrictos preceptos de esta
religión. Y una de las normas más medievales y reprobables -para mí- de las
costumbres impuestas a su feligresía: la subordinación de la mujer al hombre.
En la presencia de un hombre, una mujer no puede bendecir las mesa, por
ejemplo. En un entredicho entre marido y mujer, es la palabra del marido la que
se impone. Uno puede argumentar que eligieron entrar a ese particular credo y lo
acepto. El problema son las generaciones siguientes que nacieron y se criaron
en ese ambiente, formateados desde la cuna. Lo digo por experiencia. No me fue
sencillo tomar la decisión de abandonar las creencias con las que crecí y eso
que provenía de un culto más laxo y mucho menos opresivo en su día a día.
Yo soy muy respetuoso de las creencias, pero también soy de llevarme de
la mejor información que puedo obtener de los temas que me interesan, ya sean
técnicos y dentro de mi profesión, como históricos o culturales. Y me consta,
hasta lo mejor de mis diversas fuentes, que la "palabra de Dios"
desde la cual se basa toda la rigurosa fe de los Testigos de Jehová, es una tergiversación
reciente, tendenciosa y perversa de los
manuscritos clásicos que sobrevivieron hasta nuestros días. Y no se
trata de una "interpretación" particular de los escritos. Los
directivos, puñado de miembros del Cuerpo Gobernante (7 en total históricamente,
hoy circunstancialmente 8, en parte por efectos de la pandemia) saben
perfectamente que lo que transmiten a sus feligreses no corresponde fielmente a las
Sagradas Escrituras, según los numerosos manuscritos sobrevivientes hasta
nuestros días. Estos son los documentos más auténticos que un creyente puede
disponer de lo que llaman "la palabra de Dios".
1. A CRITICAL LOOK AT THE JEHOVAH'S WITNESS BIBLE: THE NEW WORLD TRANSLATION
- Artículo | M. Kurt Goedelman - Personal Freedom Outreach - (The Association
for Theological Studies | P.O. Box 290168 | Minneapolis, MN 55429)
2. SHARPLY
CRITIZISED BY SCHOLARS - Artículo - www.sixscreensofthewatchtower.com.© 2008.
3. THE
KINGDOM INTERLINEAR TRANSLATION OF THE GREEK SCRIPTURES - Libro - Watchtower
Bible and Tract Society - Editor - Edición original 1969 - Reedición corregida
1985.
4. FIGHT AGAINST INDEPENDENT THINKING - Artículo - EL
ATALAYA - Enero 15 de 1983 págs 22-27
5. "The wisdom of God can only become known through
Jehova's channel of communication, the Faithful and Discreet Slave" - Nota. EL ATALAYA - Octubre 1 de
1994. pág. 8
6. THE WATCHTOWER FILES - Libro - Duane Magnani - 1985 -
Bethany House Publisher
7. MISQUOTING JESUS - Libro - Bart Erhman - 2005 - Harper
Collins
8. THE
WALSH TRIAL - Transcripción Completa. https://archive.org/details/WalshTrial
9. CRISIS
OF CONSCIENCE - Raymond Franz - 1983 - Commentary Press