Vamos a distraernos un poco del
espantoso presente vernáculo. Other shit happens en el mundo y de eso quiero
hablar.
Ando comprobando por enésima vez
mi fiel apego a las leyes de Murphy, uno de los pensadores más importantes que
dio el Siglo XX. Me compré un telescopio hace 20 días y desde el mismo día que
lo recibí el cielo en San Pedro permanece cubierto. Salvo una noche clara que
entre juego y juego y aprender a manejarlo logramos ver Marte y Saturno y uno
que otro grupo de estrellas dentro de la total ignorancia sobre el firmamento
que poseo por el momento.
Interesado en averiguar cuanto
episodio de interés hay para ver en el cielo además del cuasi estático domo de
estrellas y planetas vengo a descubrir varios episodios dignos de aquí a unos
meses. Por ejemplo, una diminuto evento que parece ser digno de filmar es lo
que llaman el "tránsito lunar" de la Estación Espacial
Internacional" o ISS que sobrevuela la tierra desde hace varias décadas. Esto
quiere decir que mientras miramos la luna que nos da un fondo claro y
brillante, el aparatito (en realidad un edificio bastante amplio con enormes
pantallas solares a sus costados), pasa por delante a los pedos y por un
instante lo podemos ver,
telescopio mediante.
Desde nuestro patio se podrá ver
este fenómeno el día 22 de octubre a las 18 hs 32 minutos y 32 segundos con 83
centésimas. Sí, tal como lees. No es el tren a retiro, es bastante más puntual
el aparato. El cruce dura 1.6 segundos y pasa por un extremo de la imagen de la
luna. Si quiero ver unas décimas de segundo más debo trasladarme unos kilómetros
hasta la localidad de El Tala, ya en territorio Salteño, para verlo atravesar
todo el diámetro lunar. Aunque ganas no faltan, prefiero la comodidad de casa.
Y a raíz de buscar este dato me
vengo a enterar de como es la vida dentro del laboratorio espacial, varias de
sus características, como se duerme, como son los baños, la comida, los
ejercicios obligatorios para no perder masa muscular, etc. Y dentro de esas
excursiones informales que los propios habitantes ofrecen también muestran la
impaciencia que tienen por volver a la tierra después de permanecer largos
meses encerrados en ese habitáculo ingrávido.
El pasado día 11 se lanzó desde el
cosmódromo Baikonur (Kazakhstan) una misión a bordo de una cápsula Soyuz para el recambio de parte de
los habitantes, entre ellos una chica que fue la
que youtube mediante me hizo recorrer en detalle el interior del ISS y que
planeaba su regreso para esta semana. En esta misión subía un astronauta yankee
y un cosmonauta ruso. Este programa es el único que sigue muy aceitado entre
las entorpecidas relaciones EEUU - Rusia. Muchos altos ejecutivos de la NASA
estaban presentes en el lanzamiento.
Tanto el cohete MS-10 que pone el
conjunto de carga y la cápsula con los tripulantes en órbita y la propia cápsula
se llaman Soyuz. Tiene 3 etapas que se encienden en forma consecutiva para
alcanzar la velocidad y órbita adecuada para después acoplarse a la ISS. La
primera etapa que se compone de 4 tubos externos dura 2 minutos y medio (150
segundos) encendida y luego se separa del cohete principal. La segunda etapa se
enciende un tiempo más y finalmente la tercera etapa permite alcanzar la velocidad
y altura necesaria para dejar a la carga útil orbitando a merced de la primera
Ley de Newton.
A los 119 segundos del
lanzamiento, todavía durante la primera etapa, se produjo una falla en el
cohete que sacudió a todo el conjunto de manera muy visible en el video de a bordo
que transmitía en directo un primer plano de ambos pilotos y luego la transmisión
se interrumpió. El asunto es que la anomalía produjo la entrada en
funcionamiento de los procesos de seguridad, la cápsula se desprendió del
cohete y volvió a la tierra en caída libre hasta una altura en que la terna de
paracaídas se abrieron y tocaron tierra cerca de la localidad de Dzhezkazgan, todavía en en
Kazakhstan. Los tipos sanos y salvos. Record
Guiness de tiempo entre las dos localidades.
La cápsula Soyuz es hoy en día el único
medio para mandar gente hacia el espacio y traerlas de vuelta. Un adminículo
que ya supera el medio siglo, tiene un historial de seguridad bastante bueno.
En 1971 transportó 3 cosmonautas a lo que fue la primera estación espacial, la Salyut
1, pero debido a una despresurización sorpresiva durante el proceso de
reingreso murieron los 3 tripulantes. Fue la única tragedia producida en este
vehículo. Un incidente durante el lanzamiento en 1983 cuando estalló el cohete todavía
en tierra, los sistemas de seguridad funcionaron desprendiendo la cápsula y
depositando sus tripulantes a salvo en tierra. Aparte de esos dos episodios
centenares de vuelos cada pocos meses llevaron y trajeron tripulantes y
personal de muchas nacionalidades a la ISS. Los norteamericanos no realizan
vuelos tripulados al espacio desde 2004. Y la NASA le paga a razón de 80
millones de dólares el pasaje a los rusos para llevar a su gente.
Si bien la norma cuando algo así
pasa es paralizar el programa espacial hasta que se termine la investigación,
hay otro vuelo programado para el 20 de diciembre con un astronauta canadiense
que está en veremos.
Rusia está empezando a sospechar
que su programa espacial está siendo saboteado ya que desde 2010 vienen
ocurriendo fallas no habituales en muchos de sus vuelos no tripulados que
llevan víveres y equipamiento a la ISS. Esta semana fue la primera vez que
ocurrió con un vuelo tripulado. Pero en el último vuelo de agosto apareció un
agujero en la cápsula Soyuz que aun permanece acoplada a la ISS y que este cosmonauta Alexey Ovchinin debía investigar. Él, junto con su debutante compañero de ruta
el estadounidense Nick Hague, tenían
programados permanecer 6 meses en el espacio en lo que constituye el all
inclusive más caro del mercado. Hoy está todo eso paralizado.
Los varados en el espacio en este momento son 3, la norteamericana
Serena Auñón-Chancellor, el alemán Alexander Gerst y el ruso Segei Prokopyev,
todos navegantes y ningún investigador. Llevan los 3 un total de 103 días en el
espacio y por lo que vi del tour que hizo Serena hace pocos días tienen víveres
como para largos años de estadía. El plan de escape ante una emergencia es
tener acoplada una cápsula Soyuz-TMA de manera permanente y tiene capacidad
para 3 pasajeros, razón por la cual la población permanente nunca es mayor a 3.
Cuando es necesario disponer de más personal se acopla una segunda cápsula,
siempre la rusa Soyuz.
Espero que mi suerte con el cielo cubierto termine antes del día 22 y
por ahí pueda capturar el breve paso de estos 3 delante de la luna en un cielo
aun iluminado por el sol a esa hora. Les aviso si todo sale bien.